Reducir los riesgos de accidentes por incendios que puedan ocurrir dentro de la Institución, mediante tres fases (prevención, auxilio y recuperación) con la finalidad de salvaguardar la integridad de los recursos humanos, materiales y ambientales; y en caso de que sucediera un siniestro conocer los métodos más idóneos para el control y combate de incendios.